18 de abril de 2010

Wonderland

Todos los dias caigo por un gran agujero que se encuentra bajo un arbol siguiendo a un conejo blanco vestido con chaque y con un reloj enorme que dice que llega tarde. Luego me encojo, me hago enorme, luego encojo otra vez y vuelvo a agrandar en una casa, haciendome sacar los brazos y piernas por las ventanas. Hablo con las flores, con una pasiva oruga fumadora, con dos graciosos hermanos gemelos, con un gato con una sonrisa enorme que se desvanece, intento beber te con un sombrerero y una liebre de mazo que me tira tazas a la cabeza, luego juego al criquet con una reina cabezona, y veo que un bebe se convierte en un lechon, me veo en un mar y en una partida de ajedrez tras atravesar un espejo...

eso solo por las mañanas.

Mis tardes son algo mas interesantes.