24 de noviembre de 2010

Cansada de la teoría del camino

Cansada de la teoría del camino...

Me percaté que la vida era algo más que un camino, era algo más amplio, un árbol. No tenemos camino, tenemos raíces, pero no las raíces que van hacia el fondo de la tierra para abastecerse, sino raices que avanzan, cada una por su lado.

¿Cada una por si lado? Sí,cada raíz abarca un ámbito, cada una según las necesidades del árbol al que pertenece. Centrémonos en una en particular, la raíz que forma la empatía por ejemplo, esta raíz se topa con otras raíces en su crecimiento, otras que pertenecen a árboles distintos, de distintas clases, pero que tienen algo en común: este punto de encuentro, esa creencia, ese ideal. Se enreda entre ellas se recrea con parte de lo que son y se siente que forma una alianza. Crece esta raíz que sigue avanzando, evoluciona modifica su concepto o no, puede que se separe de las otras pero si mira un poco atrás seguirá sintiendo esa unión. Su savia la acariciará.

Y cada raíz abastece a ese gran árbol que es nuestro propio ser. Cada una por su parte, que sigue su propio sendero. Si el árbol se encierra en ser abastecido por una sola raíz habrá algunos problemas, esta raíz crecerá y crecerá, pero por mucho que lo intente no podrá abastecerlo completamente.

¿Lo ideal? Dedicar parte del tiempo a cada raíz. Y si fuera posible, que cada raíz diera frutos en su camino (sigue siendo una metáfora, podriamos llamarlos tubérculos para los escépticos), estos frutos alimentarían como sustrato a otras raíces independientes a nuestro árbol.

..voy y me invento otra.